INICIO
Resumen de Los Consejos de Esculapio
En la carrera de medicina verás lo más asqueroso y repugnante de la especie humana, tendrás que palpar tumores, curar llagas verdes de pus, contemplar orinas, captar olores fétidos y escrudiñar esputos. Y, además, debes mostrar interés por los detalles más vulgares de la existencia de tu paciente recetándole una buena dieta o que duerma o camine de alguna forma, asimismo deberás contestar e ir al llamado de los dolores más insignificantes del padecido. Los pacientes interrumpirán tu descanso, los pobres piden que les cures sus males y los ricos se aprovechan de tus saberes tratándote como un esclavo. No puedes aislarte y descansar culminada tu hora de trabajo ya que tu puerta quedará siempre abierta. Te perderás cumpleaños, fechas importantes, navidades, tiempo con tu familia. De ahora en adelante tu tiempo ya no te pertenece, tu vida pasará como a la sombra de la muerte, entre el dolor de cuerpos y almas y la hipocresía que encabeza la agonía; la raza humana es el dios infectado de pecados capitales y aun así ¿Deseas salvarla? ¿Piensas que estudiar medicina te hará rico? Pues sigue creyéndolo, porque solo existiera en tu mente ya que la realidad es diferente. Cuando cobras por tus servicios la gente te critica por el monto a pagar, y si tratas mal a alguien, pero si atiendes bien a 100, no importa, solo basta uno para qué digan que eres un mal médico. Te verás solo en tus tristezas, en tus problemas, solo en tus estudios, solo en medio de la humanidad. Ni siquiera encontrarás apoyo entre tus colegas. Tú única recompensa será la conciencia de que salvaste a alguien. Piénsalo bien ¿De verdad quieres ser un galeno? Si te satisface la sonrisa de una madre, el gracias de una persona adulta y aliviar los dolores de la gente.
Entonces, hazte médico.
Comentarios
Publicar un comentario